Creemos que la Biblia es la palabra viva inspirada de Dios; infalible e inmutable desde Génesis hasta Apocalipsis (2 Timoteo 3:16)

Creemos que Jesús es el unigénito Hijo de Dios, nacido de una virgen; que fue crucificado, murió y al tercer día resucitó de entre los muertos; que ascendió al cielo donde ahora está sentado a la diestra del Padre (Isaías 7:14, Lucas 1: 30-35, Hechos 2: 32-36)

Creemos en Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo; estos tres son uno. (1 Juan 5:7)

Creemos que la salvación solo se puede obtener mediante el arrepentimiento y la confesión de nuestros pecados; que es un don dado por gracia divina y no por obras, y que solo puede recibirse por fe en Jesucristo, el único mediador entre Dios y los hombres (Hechos 4: 11-12, Efesios 2: 8, 1 Timoteo 2: 5)

Creemos que la santificación ocurre instantáneamente en el espíritu, pero que debe desarrollarse progresivamente en el cuerpo y el alma de cada hijo de Dios. (Hebreos 12:14, Romanos 6:19-22)

Creemos en expandir el evangelio del Reino a nivel local, nacional y global por cualquier medio posible. (Mateo 24:14)

Creemos en el bautismo en el cuerpo de Cristo por el cual la persona acepta a Jesús, experimenta el nuevo nacimiento y se convierte en un nuevo miembro del cuerpo de Cristo y heredero de la vida eterna. (1 Corintios 12:27)

Creemos en el bautismo en agua como símbolo de identificación con la muerte al pecado y con la resurrección de Jesús para la vida eterna. (Romanos 6:4)

Creemos en el Reino de Dios como un gobierno donde Jesús es Rey, y ambas son verdades absolutas y supremas (Juan 3: 3, Hechos 8:12, Romanos 5:17, Hebreos 12:28).

Creemos que una forma de transmitir bendiciones, sanidad y el poder de Dios a otros es a través de la imposición de manos. (Hechos 8: 15-17, 1 Timoteo 4:14, 2 Timoteo 1: 6)

Creemos que sin fe es imposible vivir una vida que agrada a Dios y que heredamos las bendiciones por fe (Hebreos 6:12; 11: 6).

Creemos en el poder del Reino para sanar a los enfermos, expulsar demonios y realizar milagros, señales y prodigios. (Marcos 1: 32-34, Juan 14:12, Mateo 12:28)

Creemos en la segunda venida de Cristo para su pueblo; que los muertos resucitarán primero, salvos y no salvos; que los cristianos que están vivos serán arrebatados por Jesús; que todos experimentarán el Juicio; que los creyentes resucitarán a la vida eterna con Jesús y se presentarán ante el tribunal de Cristo, mientras que los incrédulos resucitarán para sufrir la damnación eterna y serán juzgados en el Gran Trono Blanco de Dios. (Daniel 12: 1-2, Romanos 14:10, 1 Tesalonicenses 4: 13-17, Apocalipsis 20: 11-15)